Mar Gijón: "El movimiento de mujeres en Palestina fue clave en el resurgir del pueblo palestino contra la ocupación israelí"

¿Por qué este libro? ¿Cuál es su objetivo?

Mar: Este libro parte del interés de la Asociación BILADI en mostrar y visibilizar, por un lado,  tanto el papel de las mujeres palestinas, de forma general, como específica dentro del movimiento asociativo de mujeres desde sus comienzos en una lucha anticolonialista, nacionalista y de sus derechos, al mismo tiempo que sirva como aportación para completar la historia que se conoce de Palestina, de antes y después de 1948, mediante la propia historia del movimiento de mujeres, como parte indivisible de aquella, así como de las mujeres que han formado parte de él y que siguen haciéndolo.

La historia y el papel de las mujeres palestinas ha sido, al igual que la propia historia de Palestina, una historia oculta y ocultada. El movimiento sionista ha intentado destruir y hacer desaparecer desde finales del siglo XIX hasta hoy todo lo que tenga que ver con Palestina en todos los ámbitos, por esta razón cualquier contribución en este sentido nos parece imprescindible en el apoyo al pueblo palestino y su causa.

¿Qué es lo que más destacarías del movimiento de mujeres palestinas y por qué?

El movimiento de mujeres en Palestina ha sido un movimiento nacionalista -no se puede disociar de la lucha del pueblo palestino en su conjunto-,  anticolonial y por la lucha de los derechos de las mujeres. Es importante resaltar también que este movimiento no apareció en los años ochenta con la primera Intifada, sino que lo hizo a finales del siglo XIX y el XX, constituyéndose oficialmente en 1929. En el origen del movimiento hasta la creación del Estado de Israel en 1948 las mujeres formaron parte, tanto de forma individual como colectiva, de numerosas acciones como huelgas, manifestaciones, sabotajes, recolecta de fondos para las familias de los mártires y de los presos, escritura de manifiestos, contrabando de armas, como voluntarias en el frente, etc.

De otro lado, también ha de resaltarse la capacidad del movimiento de mujeres de poder reemerger y desarrollarse después de ocurrir al-Nakba de 1948 (el Desastre), es decir, la destrucción de la Palestina histórica por la que Palestina dejó de existir tal y como existía hasta entonces, se creó el Estado de Israel y la población palestina quedó disgregada desde entonces, en lo que hoy se denominan los Territorios Ocupados Palestinos (que comprenden Cisjordania, Gaza y Jerusalén Este), en los países árabes colindantes a los que se dirigieron tras su expulsión más de la mitad de la población palestina y en lo que sería a partir de entonces Israel, con la población palestina que logró permanecer allí.  En estas circunstancias el movimiento de mujeres no solo reemergió si no que fue clave en la lucha del pueblo palestino contra la ocupación a finales de los sesenta, setenta y ochenta.

¿Consideras que el movimiento de mujeres palestino se ha visto relegado por el movimiento nacional? Y hoy en día ¿Cómo resumirías la situación del movimiento de mujeres palestino?

Creo que se podría decir que después de los Acuerdos de Oslo, dentro del marco de los denominados Acuerdos de Paz y en la supuesta construcción de un estado palestino, las mujeres priorizaron su lugar como mujeres y la lucha por sus derechos, vuelvo a repetir que en el contexto de una supuesta paz y que se pensaba que se estaba poniendo los cimientos de un Estado independiente. No obstante, pasados los años, en las décadas posteriores, con todos los donantes y los fondos que aparecieron en Palestina, sin que desapareciera la ocupación militar, hicieron que surgieran numerosas oenegés y que se distorsionara el trabajo de muchas de ellas de acuerdo con las líneas que marcaban desde el exterior, relegando, o no priorizando, la lucha contra la ocupación que no solo continuaba sino que se acrecentaba de numerosas formas, por ejemplo, con el aumento devastador del número de colonias y colonos, o con la construcción del muro del Apartheid…

Me atrevería a decir que en la actualidad, aunque la situación que se vive en Palestina es peor que nunca, el movimiento de mujeres, al igual que el resto de la sociedad civil palestina, están luchando desde diferentes frentes volviendo a los comités de base populares -que fueron tan eficaces en los años ochenta-, y que lideran distintas campañas con eco internacional, como la campaña de Boicot, Desinversiones y Sanciones -BDS-, ante la falta de un liderazgo político palestino fuerte. Esta ausencia de liderazgo es debida a la imposibilidad de ejercer sus funciones en el contexto de la ocupación, por haber sido encarcelados o asesinados una parte de él por Israel, o a la pérdida de legitimidad de otra parte.