Forzudos y constructores: misteriosas piedras salpican nuestras montañas

Varios son los gigantes que encontramos en nuestra mitología. Además de los más conocidos, los Jentiles, hay otros dos personajes de fuerza descomunal: Sansón y Roldán. Se trata de dos personajes históricos que a lo largo del tiempo se han diluido y mezclado con creencias y leyendas, pasando a ser, para la mentalidad popular, personajes fantásticos, míticos, dotados de características sobrehumanas. Ellos, junto a los Jentiles, son los responsables de la ubicación de los menhires que pueblan nuestros montes.

Muchas son las piedras que habrían colocado a lo largo y ancho de nuestra geografía. También se les atribuye la autoría de varios agujeros en rocas que forman pasos. Este atributo constructor lo comparten estos gigantes con otros seres míticos, que se vinculan, también, a la erección de megalitos, como los crómlech o dólmenes, pero que también colaboran en la edificación de castillos: son Mairi, Mairu, Maide...

Roldán y Sansón: de la historia al mito Roldán, también conocido como Errolan, Roland u Orlando, fue un comandante de los francos -pueblo germánico que llegó a dominar un vasto territorio en Europa-, y sobrino del emperador Carlomagno. Está vinculado históricamente a la batalla de Orreaga-Roncesvalles, donde fue muerto por los vascones, el 15 de agosto del 778. Su vida pasó a la literatura, formando parte de la llamada Materia de Francia, conocida también como Ciclo carolingio (un conjunto de leyendas que componen las canciones de gesta en la literatura medieval francesa).

Sus hazañas se narran en el Cantar de Roldan, poema épico escrito aproximadamente en torno a los años 1086 y 1104, en el que el héroe aparece dotado de un cuerno y de su espada Durandarte. Este poema recorrió toda Europa, adquiriendo gran éxito. También lo hizo por el Camino de Santiago, auténtica autopista cultural de la época, llegando a tierras navarras, e iniciando, probablemente, una simbiosis entre el mito y la historia, siendo paulatinamente asumido por las creencias mitológicas de la gente de estas tierras.

Sansón es otro caso de asimilación mitológica de un personaje histórico, ya que, según un relato de la Biblia hebrea, fue uno de los últimos jueces israelitas. Estos eran también conocidos como los Hijos de Israel, o las doce tribus de Israel. Según narra la Biblia, Abraham, el primero de los tres patriarcas del judaísmo, engendró a Isaac, padre de Jacob. Este último tuvo doce hijos, que se unieron a los dos hijos de José el Soñador y fundaron las doce tribus de Israel. Fueron reconocidos como descendientes de los patriarcas, y entre ellos repartió Josué -sucesor de Moisés elegido por Dios durante la conquista de Canaán- la Tierra Prometida, es decir Canaán.

Sansón, cuya historia se describe en el libro de los jueces, es presentado como una figura fuerte para combatir a sus enemigos, capaz de actos casi sobrehumanos. Por ejemplo, se cuenta que venció a un león sin armas, destruyó un templo filisteo con sus manos o venció a todo un ejército usando tan solo la mandíbula de un burro. Según el libro, esta fortaleza únicamente se presenta para realizar actos por la voluntad de Dios. Debido a ello, la mitología de nuestra tierra lo asumió como un gigante de fuerza descomunal.

Mairi, Mairu y Maide: genios no cristianos

Estos númenes son presentados en la mitología vasca como constructores de diferentes elementos megalíticos, como pueden ser casas fuertes, crómlech y menhires. Los Mairi son genios femeninos de fuerza colosal. Muy característicos de Baja Navarra, en otros puntos adquieren diferentes nombres, como Amilamia. Se dice, también, que fue el humano más antiguo que habitó estos lares.

Mairu es como se designa, principalmente en la zona norte de los Pirineos, a seres humanos de otro tiempo, no cristianos. Estos también son constructores de monumentos megalíticos. Hasta hace relativamente poco tiempo, se llamaba Mairu a alguien sin bautizar. Algunas leyendas cuentan que el brazo desecado de Mairu o un hueso del mismo, o también un hueso de un niño muerto sin bautismo, tiene virtudes misteriosas. Se le denomina Mairu-beso y el genio lo utiliza como antorcha para alumbrar de noche y adormecer a los habitantes de alguna casa.

Maide, también conocido en la zona norte, es constructor de megalitos. Suele bajar de noche por la chimenea, para recibir las ofrendas que le dejan los moradores de la casa al acostarse.

Moradas de forzudos y constructores

Roldán

Errolan Arriya, valle de Ata en la sierra de Aralar (Navarra) · Errolanleizea, Belarzinketa en el monte Aritz de Leiza (Navarra) · Arrolanen-harria, Saint-Just-Ibarre (Baja Navarra) · Errolanen-harri, montaña de Apanize en Behorlegi (Baja Navarra) · Arrolan’en botxia, Bostmendieta (Zuberoa) · Atekaitz, Itsasu (Lapurdi)

Sansón

Sansonharri, Tolosa (Gipuzkoa) · Aitzorroza, Ursuaran (Gipuzkoa) · Sansonarri, entre Zegama y Segura (Gipuzkoa) · Sansonharri, monte Adarra de Urnieta (Gipuzkoa) · Sansonharri, Zegama (Gipuzkoa) · Peñas de Aya, Oiartzun (Gipuzkoa) · Dunbas, Hendaia (Lapurdi) · Sansonen-arroka, Azkain (Lapurdi) · Sansonarri, entre Lezaun e Ibiriku (Navarra)

Mairi

Dolmen de Mairietxe, Mendibe (Baja Navarra) · Dolmen de Armiaga, Behorlegi (Baja Navarra) · Dolmen de Sorginetxe, Arrizala (Araba)

Mairu

Mayrumendia, Artajona (Navarra) · Mayrubide, Manurga (Araba) · Mairulegorreta, Gorbea (Araba-Bizkaia) · Mairuburueta, Akosta (Araba) · Mairubaratz, Oiartzun (Gipuzkoa) · Mairuillarri, Zugarramurdi (Navarra) · Mairuilarrieta, monte Mondarrain (Lapurdi) · Mairuetxe, Mendibe (Baja Navarra) · Mairietxe, monte Okabe (Baja Navarra) · Casa fuerte de Irisarri (Baja Navarra) · Casa fuerte de Donamartea, Lekunberri (Baja Navarra) Casa fuerte de Aphatea, Bussunarits-Sarrasquette (Zuberoa) · Casa fuerte de Lagras, Zaro (Baja Navarra) · Casas fuertes de Larrea y Lahostanea, Izpura (Baja Navarra) · Crómlech de Ibañeta, Zugarramurdi (Navarra) · Maruelexa, Nabarniz (Bizkaia)

Leyendas

Sansonharri en Urroz

“Cuentan en Zalba, en el valle de Arrasgoiti, que Roldán pasó su juventud, hasta los 18 años, en una cueva alimentándose de la leche de una cabra que tenía consigo. Lo que le debió de dar una fuerza hercúlea. Habiendo venido don Carlomagno a la conquista de Navarra, se propuso demoler la iglesia de un pueblo cuando esta se hallaba llena de gente. Para esto subió a la cumbre del monte llamado Higa de Monreal, con la intención de arrojar desde allí un enorme peñasco sobre la iglesia; pero, al hacer el último esfuerzo, resbaló en una boñiga y piedra y hombre rodaron hasta la villa de Urroz, distante como unos cinco kilómetros. En el lugar aún se conserva la piedra, que es como de dos metros de larga y un metro de ancha”.

Recopilada por José Miguel de Barandiarán

Sansonharri de Tolosa

“En el paraje de Illarramendi de Tolosa, aún hoy se puede ver una enorme piedra caliza. Cuentan que el peñasco fue arrojado por el mítico Sansón desde el monte Uzturre”.

Recopilada por José Miguel de Barandiarán

Mairietxe de Mendibe

“Mairietxe -casa de Mairis- es como se conoce al dolmen de Gaxteenia, en Mendibe. Los antiguos decían que Mairetxe fue la iglesia de las Mairi. La piedra de la cubierta fue traída por una Mairi sobre su cabeza mientras hilaba. Tuvo que traerla del monte Armiaga o de Urtxuri, pues tal clase de piedra no existe en otra zona del entorno”.

Contado a José Miguel de Barandiarán por J. Etxemendi de la casa Gaxteenia de Mendibe

Maruelexa de Nabarniz

“En la cumbre del monte Arrola de la localidad de Nabarniz se encuentra la cumbre conocida como Maruelexa, iglesia de Mairu. En su cima se encuentra un interesante castro de la Edad del Hierro. Se cree que en esta cumbre existió una iglesia de moros (quizás Mairus), y que, cuando sale el sol en la mañana del día de San Juan, aparece una caldera misteriosa, y que en ese lugar no nace el helecho y hay un tesoro enterrado”.

Recopilada por José Miguel de Barandiarán

Errolan Arriya de Ezpeleta

“En las proximidades del caserío Hartsugaina de la localidad labortana de Ezpeleta, se ve una enorme roca, que dicen fue lanzada por el gigante Roldán con intención de destruir el pueblo desde la cumbre de Mondarrain. Pero que, perdiendo impulso en el tiro, la piedra quedó en su actual emplazamiento, y que tiene grabada la marca de la mano del gigante”.

Recopilada por José Miguel de Barandiarán

En el libro encontrarás información detallada para recorrer estas dos rutas:
- Oianleku (Gipuzkoa): el enigma de los círculos pétreos.
- Errolanen Arriya (Nafarroa): las huellas de Roldán en Ata.

Extractos del libro Rutas mitológicas vascas