La prostitución en Euskal Herria: una historia tan antigua como desconocida

Las prostitutas siempre han sido las cristalizadoras de todos los tabúes y tópicos que revolotean a su alrededor: el adulterio, la lujuria de los religiosos, el placer carnal desligado del vínculo afectivo, la sexualidad activa y no subsidiaria de las mujeres... Todo aquello que siempre ha existido y que pocas veces se ha querido nombrar salta a la vista cuando las putas salen a la calle: la hipocresía de las sociedades puritanas, el cinismo de las castas eclesiásticas, el machismo de hombres y mujeres o el paternalismo de quienes sienten la necesidad de redimirse para purgar sus propias contradicciones.

Cada pueblo tiene su historia y sus protagonistas. Sus emblemas y sus silencios. Ni tan diferentes, ni tan parecidos. Decir, a estas alturas, que el ejercicio de la prostitucin ha sido una constante en todas las sociedades desde hace siglos es una obviedad que no precisa de más detalles. Sin embargo, analizar las reacciones que ha suscitado en hombres y mujeres de distintas épocas supone un ejercicio necesario. Conocer las condiciones en las que las prostitutas ejercían su profesión en sus múltiples y variadas tipologías y circunstancias, y destapar las contradicciones que generaban a su alrededor deja al descubierto el tipo de estructuras, relaciones de poder, mecanismos de legitimacioìn y nomenclaturas morales que se dan en cada una de las sociedades, Incluida la nuestra.

Itziar Ziga nos invitaba en Sexual Herria (Txalaparta, 2011) a poner encima de la mesa algunos de los muchos tabúes que han acompañado a la imagen mitificada y mistificada de una arcadia vasca en la que la sexualidad se dibuja como algo ajeno, ausente, casi anecdótico y, desde luego, nada pasional. Con la sonrisa en los labios y asintiendo de forma inconsciente, a medida que se pasan las páginas, quien lo lee compone y descompone la historia que tantas veces nos han contado: el ejercicio de la libre sexualidad en Euskal Herria es algo tan añorado, peleado y esperado como el ejercicio de la libre autodeterminación. Si admitimos que la sexualidad ha sido y sigue siendo tabú, cuánto más no lo será sumergirnos en una de sus prácticas más señaladas, condenadas, proscritas y sancionadas: la prostitución. Descubrir su evolucioìn y las respuestas con las que se han encontrado las mujeres que la ejercían es algo tan apasionante como, en muchos casos, avergonzante. Refleja partes de nuestra historia que encarnan a la perfección las contradicciones de una sociedad que se mostraba de una manera determinada y que, sin embargo, en la oscuridad de las cunetas y en la media-luz de los burdeles, era tan variopinta y resbaladiza como cualquier otra. Y es que, tan revelador como conocer los más cacareados caminos de nuestra historia, es conocer sus márgenes, la anchura de los mismos y la profundidad de su ostracismo.

Que la prostitución sea uno de los temas que aún hoy nos haga removernos en nuestro sillón cuando lo intentamos abarcar desde cualquier perspectiva (feminista, económica, histórica, etc.) nos muestra la necesidad de libros como el de Charo Roquero. Nunca hasta ahora se había publicado un recorrido histórico sobre la prostitución en Euskal Herria, una práctica enmarcada en unos contextos económicos, sociales y religiosos tan específicos que hacían que practicarla en las zonas más industriales de la costa bizkaina poco tuviera que ver con ejercerla en los caminos imbricados que conectaban los pueblos del Baztan. La estigmatización de las prostitutas, aun siendo una constante en toda su historia, no era la misma si estas ejercían su labor de forma regular con unos clientes determinados, como era el caso de las meretrices, o si lo haccían de un modo más “arbitrario”. La maternidad, los exilios forzosos o las prácticas y riesgos de los abortos clandestinos son algunos de los aspectos que nos muestra Roquero en estas pginas, trabajando desde las vivencias personales de las protagonistas cuyas historias se cuelan en los archivos y que permanecerían silenciadas de no ser por el esfuerzo investigador de la autora. La evolución de los prostíbulos, la situación de las prostitutas durante la época de la República y durante la Guerra Civil, las reacciones que simultáneamente despertaban entre las mujeres de su entorno: desprecio, compasión, solidaridad, violencia... todos estos aspectos se asoman a las páginas de este libro con la contundencia del rigor historiográfico, viendo la luz en muchas ocasiones por primera vez, y ofreciéndonos los hechos y testimonios escritos de una historia tan antigua como desconocida.

Zaloa Basabe